Shere Hite publica en 1976 “El informe Hite” en una época en que la sociedad aparentemente había vivido una revolución sexual, la alemana-estadunidense fue la confesora de toda una generación.
La historiadora, escritora y activista feminista investigó durante cinco años una recopilación y análisis de más de 3.000 respuestas a cuestionarios que ella diseñado y envió por correo o repartido en mano a mujeres por todo Estados Unidos.
En su investigación concluía que las mujeres llegaban al orgasmo mediante la estimulación del clítoris y no durante el coito. Decía que el 95% de las mujeres fingía los orgasmos y aseguraba que se masturbaban con frecuencia.
El informe Hite fue un triunfo en ventas a pesar incluso de sus propios editores y de las críticas que recibió. Casi cuatro décadas después ocupa el número 30 en la lista de los libros más vendidos de todos los tiempos en inglés.
Hite estudió Historia en la Universidad de Florida, se trasladó a Nueva York para doctorarse en Historia Social en la Universidad de Columbia. Su trabajo como modelo costeó su educación. Sin embargo, en un anuncio para las máquinas de escribir Olivetti, apareció como secretaria sexy junto a la frase: “Una máquina de escribir tan inteligente que ella no tiene que serlo”, esto la marco tanto, que inició de su trayectoria como activista feminista.
Representantes de la Organización Nacional de Mujeres (NOW) se manifestaron afuera de las oficinas de la empresa, ella se unió. Y a partir de esto decidió investigar sobre la sexualidad femenina. Su fama obligó a escribir la palabra clítoris y orgasmos en medios que las tenían prohibidas.
Sus estudios marcan un hito, ya que aseguraban que las mujeres no necesitaban a un hombre para satisfacerse, motivo por el cual fue acusada de promover el odio a los hombres.
También escribió “El Informe Hite sobre hombres y sexualidad masculina” (1981), “Mujeres y amor: una revolución cultural en progreso” (1987), desmitificando lo que sucedía en la intimidad de las parejas.
A partir de la divulgación de las fotografías donde había posado para revistas como Play Boy, las cuales no le avergonzaban, pero fueron usadas para desacreditarla, además de entrevistas incómodas en televisión ocurrió lo que ahora conocemos como cancelación.
Hite es uno de los miles de ejemplos de mujeres que lucharon por la consigna de la liberación de la mujer, en este caso, de la liberación sexual, y que, cansada de los señalamientos, amenazas y desacreditaciones, prefiere retirarse y acabar con las reivindicaciones femeninas.
Realizo un autoexilio forzoso a Europa, renunciando incluso a la nacionalidad americana, ahogada por las críticas constantes a su obra y su persona.
Hoy, a través de este humilde articulo y como acto de justicia, recuperarnos, valoramos y reivindicamos su impacto y su legado.
Raquel Berrocal Sibaja: Internacionalista y Ecofeminista. Consultora en temas ambientales y de género. Costa Rica.
“Libremente revolucionaria, revolucionariamente libre”